Los catéteres de ablación por radiofrecuencia (RF) están convirtiéndose en una terapia de primera línea para muchos pacientes con arritmias. Sin embargo, los sistemas actuales no permiten una monitorización y control precisos de la creación de la lesión en el extremo del electrodo. Incluso dispositivos commercials recientes que incorporan distintos sensores en el extremo distal sólo proporcionan medidas indirectas sobre la eficacia del tratamiento en la zona deseada. En el caso de la fibrilación auricular, la ejecución imperfecta del protocolo de ablación se asocia con recurrencias a corto y largo plazo. La entrega inadecuada de energía puede producir pops y comprometer la seguridad del paciente, llegando incluso a provocar hemorragias internas.

MedLumics está desarrollando un dispositivo de ablación guiado por imagen óptica, capaz de mostrar el tejido en el entorno del electrodo. Usando un análogo óptico de los ultrasonidos con una precisión 20 veces superior, es capaz de determinar la distancia entre el catéter y la pared, su orientación relativa y la calidad del contacto. Incluso en presencia de capas finas de sangre, la luz puede penetrar y analizar el miocardio en la pared cardiaca, obteniendo un contraste fuerte entre el tejido intacto y el ya tratado.

Esta información, mostrada durante las fases de navegación y de ablación, permite la creación de lesiones continuas con una profundidad más controlada. Esto es crucial para prevenir la reconexión de las venas pulmonares asociada a un aumento de las recurrencias, después de procedimientos inicialmente satisfactorios. Durante la entrega de energía, el médico puede ajustar la potencia aplicada tan pronto como se obtenga una profundidad de lesión deseada, reduciendo potencialmente el riesgo de generación de burbujas de vapor y de perforación.

Radiofrequency (RF) ablation catheters are becoming a first line therapeutic option for many arrhythmia patients patients. However, current systems do not allow accurate monitoring and control of lesion creation at the tip of the electrode. Even recent commercial devices incorporating different sensors at the distal end only provide indirect measures of the desired effect. In the case of Atrial Fibrillation, imperfectly performed ablation has been linked to short and long-term recurrence. Inadequate energy delivery can produce pops and compromise patient safety.

MedLumics is developing an optically guided device able to image tissue in the vicinity of the electrode. Using an optical analogue of ultrasound, it is able to determine catheter-wall distance and contact quality. Even in the presence of thin layers of blood, light can penetrate and probe the myocardium inside the wall, providing strong contrast between healthy and ablated tissue.

This information, displayed during the navigation and ablation phases, allows creation of continuous lesions with controlled thickness. This is crucial to prevent pulmonary vein reconnection, and recurrence, after initially successful procedures. During energy delivery, the doctor can adjust the applied power as soon as a desired lesion depth is attained, potentially reducing the risk of pops and perforation.